Nace en octubre de 2003, cuando un grupo de trabajadores con más de 20 años de experiencia (médicos, administrativos, enfermeros, técnicos y personal de maestranza) despedidos del Instituto Médico de Cirugía Cardiovascular (IMECC) del barrio de Caballito decidieron gestionar la clínica de alta complejidad, para conservar su fuente laboral.